CORONA B

EL BORO: CLAVE EN EL OLIVO

El olivo es un cultivo muy exigente en boro y una carencia limita su producción. La disponibilidad de este micronutriente disminuye en condiciones de sequía y en suelos calizos y de pH alto.

FRECUENTES CARENCIAS

Pueden apreciarse los síntomas de carencia en:

• Las hojas, observándose una decoloración progresiva (a verde pálido y amarillo) a partir del ápice y progresando perpendicularmente al nervio central. Los niveles normales varían entre 20 y 180 p.p.m. de boro.

• Las ramas, que se desfolian en los brotes terminales (aspecto de “escoba de bruja”).

• Los frutos que se deforman, quedando la carne seca, acorchada y pegada al hueso. También puede ocurrir un descenso de la concentración de la clorofila, un aborto floral y daños en la raíz.

CORONA B: EL BORO MÁS EFECTIVO

Las hojas del olivo se han adaptado a condiciones de alta transpiración y, para minimizar la pérdida de agua, disponen de una gruesa cutícula en el haz y de unos pelos aparasolados en el envés. Toda una barrera infranqueable que dificulta la absorción foliar de los nutrientes.

Por ello el Departamento de I + D de Inabonos ha desarrollado el “Complejo PRX” de doble acción, con una función tensioactiva, para facilitar el transporte iónico a través de la cutí- cula, y otra acción transmisora del boro a través de los tejidos vegetales.

CORONA B: FÁCIL EMPLEO

Corona B” es un abono boratado de alta solubilidad que puede aplicarse disuelto en agua, tanto por vía foliar como por vía radicular. “Corona B” puede utilizarse de forma preventiva unos 25-30 días antes de la floración y como corrector de carencias cuando se observen los síntomas característicos.

APLICACIONES FOLIARES Se aconseja una dosis de 1 a 3 kg./ha. (según suelo, marco de plantación y cosecha prevista) a una concentración de 0,2-0,5 % (p./v.). Puede fraccionarse la dosis en varios aportes. También puede combinarse con los tratamientos fitosanitarios.

FERTIRRIGACIÓN / RIEGO LOCALIZADO Se debe preparar una solución madre al 5 % (p./v.) para inyectar en la solución de riego, sin sobrepasar los 40 gramos/olivo. Reducir la dosis en olivos jóvenes. Se recomiendan estas aplicaciones pequeñas y frecuentes en los suelos arenosos.

Compruebe como consigue:

• ACTIVAR EL CRECIMIENTO DE BROTES Y RAICES.

• MEJORAR LA POLINIZACIÓN Y EL CUAJADO DE LOS FRUTOS.

• DISMINUIR LA VECERÍA.

• AUMENTAR LA ABSORCIÓN DE NUTRIENTES.